Textura y Sabor inigualable
La maduración de la carne en seco forma una capa parecida a una corteza que permite mantener el interior de la carne aislado y posibilita que el musculo se convierta en carne expresando sus niveles máximos de jugosidad y sabor. El tiempo oscurece la carne, dando lugar a tonos vivos color cereza, el olor es más intenso, y en boca la textura se vuelve más delicada, jugosa, con matices de madera y un bouquet intenso. Cuanto más tiempo madura la carne más intenso es su sabor.
Después de 4 semanas de madurando la carne merma apenas un 7-8%, después de 6 semanas, aproximadamente un 12%.